La solidaridad de Suecia está presente durante este mes de junio en Uganda. Y es que un grupo de voluntarios de IYC Sweden se ha desplazado hasta el país africano para participar en la construcción de una escuela de educación primaria en el distrito de Gomba.

Los jóvenes procedentes del país nórdico colaboran junto con estudiantes de la Universidad Mankerere en las diferentes labores del día a día. Los voluntarios pintan, lijan, enseyan, rejuntan y realizan diferentes tareas dirigidas al levantamiento del edificio que albergará la escuela.

Más allá

A parte de todas estas tareas, estos jóvenes también atienden a la comunidad local, pues desde el primer día se reunieron por las tardes después de cada jornada de trabajo con niños y niñas para jugar, entretenerlos, bailar, cantar e intercambiar elementos culturales, conocimientos y experiencias.

La acogida por parte de los residentes de la zona fue buenísima, y eso ha conllevado a que se genere un gran clima de convivencia y trabajo en el que los voluntarios pueden sentir en cada momento el agradecimiento y reconocimiento a su esfuerzo y trabajo por parte de los locales.

Solidaridad de Suecia

Asimismo, la gran voluntad e involucración de los jóvenes de IYC ha propiciado que se estén alcanzando objetivos que van más allá del plan inicial, al menos del que estaba previsto para el trabajo en Uganda. Parecía insuficiente para nuestros jóvenes voluntarios, ya que quisieron colaborar en la construcción de fuentes de agua potable que estuvieran más cerca del núcleo de población.

Y así fue, desde que aterrizaron en Uganda, los voluntarios han participado ya en la construcción de dos fuentes. Una gran contribución que facilita enormemente el acceso a agua potable a la comunidad local, que antes tenía que recorrer una gran distancia para poder disfrutar de este servicio básico.