28/04/2020

Voluntarios de Valladolid hacen sonreír a los mayores aislados en una residencia

Haz sonreír a un abuelo. Ese fue el objetivo de la iniciativa puesta en marcha por Cooperación Internacional en Castilla León. Y lo lograron. Con una emisión online, en la que participaron diez artistas voluntarios que, con canciones y magia, alegraron la tarde a un grupo de mayores que sufren un duro aislamiento, agravado por la crisis del Coronavirus.

Era media tarde del 27 de abril, la tarde número 44 del confinamiento, iniciado a mediados de marzo, a fin de reducir el impacto del COVID-19. Desde entonces, disfrutar de la compañía de otros se ha convertido en un lujo, inalcanzable para los más vulnerables también ante la amenaza del virus: nuestros mayores. «Y, en una conversación con el director de la residencia Santa Teresita, de Valladolid, -recuerda uno de los organizadores- surgió la idea de acompañar por Internet a los residentes. Para ello, los voluntarios haríamos lo que fuera por conseguir sus sonrisas».

Y llegó el día. El 27 de abril a las 18:25, abrimos la sesión de conferencia por Zoom, para que en la residencia pudieran configurar la imagen y el sonido. Todo a punto y comenzamos. «La gala arrancó con una canción en solitario de Joaquín, estudiante de bachillerato, que con su guitarra revivió el beso y la flor de Nino Bravo. De segundo plato, tuvimos un número de magia con el mago Chiquitini, de 9 años; seguido de la canción «Resistiré».  El rapero Farctan compuso un rap para esta tarde de espectáculo, que fue agradecido con una gran ovación del público digital -nos cuenta uno de los participantes-. Continuamos la dosis musical, con clásicos como «Clavelitos», «Un rayo de sol», y una adaptación de Joselito. Y, para terminar, disfrutamos de una interpretación de «Amazing grace» en laúd y, la guinda del pastel, un pasodoble de Rubén y María, imitado con entusiasmo por varios espectadores de la residencia».

La reunión finalizó con ganas de seguir allí toda la tarde. Los protagonistas de las diez actuaciones, el presentador y los cerca de 20 espectadores virtuales se unieron desde sus casas, para terminar con un aplauso dedicado a todos nuestros mayores, que tanto han hecho por nosotros y a quienes tanto les debemos. Fueron 44 minutos de sonrisas, tantos como días llevan los mayores sin visitas.

 

¡Muchas gracias a todos los que lo hicisteis posible!