13/10/2020

Nueva exposición sobre los efectos devastadores para la salud de vivir sin un hogar

¿Sabías que una persona sin hogar tiene una esperanza de vida 30 años más corta? Una nueva exposición de Cooperación Internacional trata de concienciar sobre los efectos destructivos para la salud que provoca vivir sin la protección y la seguridad que da algo tan básico como una casa donde vivir. Una situación que se ve además dramáticamente agravada por la pandemia.

La salud es uno de los derechos fundamentales de todo ser humano sin distinción de raza, religión, ideología política o condición económica y social, según la OMS. Y es la suma de bienestar físico, mental y social, y no solamente la ausencia de afecciones o enfermedades. Pero, si las personas sin hogar no lo tienen, ni de lejos, asegurado en circunstancias normales, durante una pandemia, en la que el aislamiento es la forma de prevenir el contagio, la situación se vuelve aún más dramática. Y es que -como destacó la entidad Hogar Sí en una acertada campaña durante el confinamiento- ante la llamada social a colaborar en la erradicación de la enfermedad con el lema “Quédate en casa” las personas sin hogar se preguntan: “¿Qué casa?”.

Y, para hacer más conscientes a los jóvenes de este acuciante problema social, Cooperación Internacional ha elaborado una completa exposición para su cesión gratuita a instituciones educativas y juveniles, como colegios y universidades.

La exposición, que suele ir acompañada de charlas de sensibilización, explica que el derecho a la salud incluye otros derechos y libertades fundamentales que se ven amenazados para las personas sin hogar, como el derecho a la alimentación, el agua, la vivienda, el trabajo, la educación, la no discriminación, la privacidad o la vida. Y es que, aunque suene muy extremo, se puede decir que vivir en la calle mata. Las personas sin hogar tienen una esperanza de vida 30 años menor que el resto de la población, porque los efectos devastadores del sinhogarismo afectan al bienestar físico, mental y social.

Para muchas personas sin hogar la salud no es una prioridad, ya que tienen que estar pendientes de su supervivencia, porque no disfrutan de la protección y seguridad que ofrece tener un hogar donde refugiarse. Además, entre los obstáculos que encuentran para cuidar su salud está, no sólo la falta de recursos, sino también su miedo al rechazo, y la dificultad para acceder a los servicios públicos, como los servicios de atención primaria, o la renta mínima, por carecer de un domicilio.

        

Las personas que viven en la calle están expuestas a enfermedades físicas, provocadas por una alimentación deficiente, estrés, falta de higiene y descanso… La carencia de hogar debilita enormemente el sistema inmunológico. Y estas personas acaban padeciendo enfermedades infecciosas, dermatológicas, problemas respiratorios, cardiovasculares, gastrointestinales, etc. Pero también afecta a la salud mental. El ruido, el miedo a las agresiones, la lluvia, el frío o el calor impiden descansar. Todo ello, unido a la soledad, la carencia afectiva y el sentimiento de abandono que supone vivir en la calle, degenera en enfermedades psíquicas como esquizofrenia, depresión grave, adicciones… La adicción es para ellos una forma de escapar del sufrimiento, como una especie de “anestesia emocional”, según el experto en adicciones Gabor Mate.

«Un Hogar. Primera medida preventiva contra las enfermedades provocadas por vivir en la calle», dice el cartel de Metro de Madrid.

 

Esta exposición forma parte de una campaña de sensibilización que se suma a los contenidos de nuestra web contra el problema del sinhogarismo, www.quitaelmute.com, y se difundirá también, a partir del 14 de octubre, a través de la cartelería de la red de Metro de Madrid, así como por redes sociales y otros medios de comunicación.

*Sigue este hilo de Twitter para ver más fragmentos de la exposición: http://bit.ly/HiloPSH_Salud.

Si quieres que esta exposición llegue a tu centro educativo, ponte en contacto con nosotros en: [email protected]. Y no nos quedemos indiferentes ante la injusticia que sufren tantas personas que tienen la misma dignidad que cualquiera de nosotros. #HazqueseaVisible