Fernando Torres es una auténtica leyenda del fútbol español y mundial. Pero detrás de ese gran futbolista, también se esconde una gran persona.

“El Niño”, como le llaman desde que empezó a entrenar con el primer equipo del Atlético de Madrid, siempre tuvo el sueño de jugar en el Calderón. Lo consiguió pronto, con 16 años. “Cuando alguien hace algo con pasión, es cuando las cosas funcionan”, nos cuenta Fernando.

Hemos podido hablar con él en la nueva edición de “Personas de Bien”, el programa de entrevistas que hacemos junto a Patri Psicóloga y a VidaCaixa.

¿Porqué una “Persona de Bien? Fernando Torres ha conseguido ser un referente para miles de jóvenes que siguen su ejemplo. Pero sabe que, cuando todo se termina (se retiró del deporte profesional en 2019), lo que queda es la persona. El fútbol ha sido su universidad, su escuela, su casa. Una casa en la que creció y de la que no ha dejado de aprender.

Es consciente de que nada sale por arte de magia. “El éxito es una cuestión de voluntad y el sacrificio tiene su recompensa” nos decía. Una voluntad que ha ido creciendo junto a los retos que ha ido superando. “Lo que nos saca adelante son las ganas de comernos el mundo”, nos contaba

Además, el deporte no solo le ha enseñado la buena cara. Sabe que “hay que ser humilde para reconocer que no eres perfecto” y que de las derrotas siempre se saca algo bueno. “El Niño” ha conseguido darle la vuelta a los reveses: “Cuando eres consciente de tus debilidades, eso se convierte en una fortaleza”. Por eso, cada vez se pone metas más altas y asegura que hay que ser capaz de marcarse nuevos retos y rodearse de buena gente. “Me quedo con los compañeros con los que iría a la guerra, porque en la vida hay muchas guerras que ganar”, asegura.

Puedes escuchar la entrevista entera aquí: https://spoti.fi/2YBWZOS