Con un mes y medio de vida, a Mateo le diagnosticaron leucemia infantil. Sus padres tomaron una decisión: no rendirse e intentar encontrar un donante para su hijo y para todos los “Mateos” que estuvieran sufriendo esta enfermedad.

Eduardo y su mujer pensaron que los médicos se habían equivocado cuando les dijeron la terrible noticia, pero no fue así. Siendo un recién nacido, a Mateo le diagnosticaron leucemia, un tipo de cáncer infantil que afecta a más de mil niños en nuestro país cada año.

A pesar de las circunstancias, la familia decidió unirse y celebrar cada minuto que pasaran con él e intentar por todos los medios encontrar una solución. Esta solución venía acompañada no solo de Mateo, sino de todos los pequeños que estaban padeciendo esta enfermedad. De esta idea nació “Médula para Mateo”. El objetivo según Eduardo era: “Intentar concienciar de lo fácil que es donar médula para cualquier niño que lo necesite. Queríamos que la gente se hiciera donante, pero no solo por nuestro hijo, sino por todos los que estaban y están en su situación”.

El movimiento social consiguió traspasar fronteras e incluso, a grandes figuras del deporte como Rafael Nadal o Mireia Belmonte. Gracias a este eco, aumentaron las donaciones de médula en numerosos países. “Conocemos 15 casos de niños que han salido adelante gracias a “Médula para Mateo””, asegura Eduardo.

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6 años después, Mateo es un niño fuerte y feliz. Sin embargo, los padres del pequeño se sienten en deuda con los “Mateos” que no lo han superado. Eduardo reivindica la necesidad de más fondos para el cáncer infantil en nuestro país y conseguir que algún día tenga una cura para todos los niños. Por eso, no quisieron que la causa de su hijo terminara con él. Eduardo dejó su trabajo para dedicarse por entero a la recaudación de fondos para proyectos de investigación relacionados con esta enfermedad y se embarcó en la ONG “Uno entre cien mil”, orientada a la ayuda de menores que padecen esta afección.

Eduardo nos habló de la película favorita de Mateo, “Kung Fu Panda”. “El pasado es historia, el futuro es una incógnita y hoy es un regalo”, dice uno de los personajes de la cinta. Eduardo ve reflejada en estas palabras una de sus preocupaciones: que cada mañana los pequeños que están en el hospital, puedan tener un presente y un futuro, y eso solo se conseguirá si hay más donantes de médula y se invierten más fondos en proyectos de investigación.

“Toda España vivió la enfermedad de Mateo como algo suyo”, aseguró Eduardo. Gracias a la generosidad, altruismo y universalidad muchos “Mateos” han podido salir adelante y celebrar todos los días la “normalidad”.

El testimonio de Eduardo forma parte del proyecto “Personas de Bien” con el que buscamos acercar testimonios de grandes personas, positivas y luchadoras. Puedes ver las demás entrevistas en nuestro canal de Youtube «Juventud Solidaria» a Vicente del Bosque, Irene Villa o Boticara García, entre otros.

Para esta iniciativa, que llevamos a cabo junto a Patricia Ramírez, contamos con la colaboración de VidaCaixa.